Soy socio desde que ingresé a trabajar en el Banco Continental y hablar de nuestra Cooperativa es remontarme a los años de mi niñez. Recuerdo que cuando tenía 10 años aproximadamente, mi padre, quien trabajaba en el mismo Banco, socio de la Cooperativa y dirigente a la vez, me pedía que lo acompañara a sus reuniones del Comité de Vigilancia. Sabiendo que esas reuniones duraban 2 horas como mínimo, yo iba gustoso porque a la salida mi recompensa era una invitación a comer. Son pasajes imborrables de mi niñez, asociados a mi querida Cooperativa.
JOSÉ CUEVA